viernes, 27 de julio de 2007

El Príncipe

"Cuando le perjudique, el príncipe debe faltar a su promesa. Debe también faltar a ella cuando han desaparecido los motivos que le obligaron a prometer."
Nicolás Maquiavelo



S.A.R. el Príncipe de España juró diciendo:

"Juro por Dios y sobre los Santos Evangelios cumplir y hacer cumplir las Leyes Fundamentales del Reino y guardar lealtad a los Principios que informan el Movimiento Nacional."

El señor Presidente del Consejo de Regencia respondió:

"Si así lo hiciereis, que Dios os lo premie, y si no, os lo demande.

En nombre de las Cortes Españolas y del Consejo del Reino, manifestamos a la Nación Española que queda proclamado Rey de España Don Juan Carlos de Borbón y Borbón, que reinará con el nombre de Juan Carlos I.

Señores Procuradores, Señores Consejeros, desde la emoción en el recuerdo a Franco: ¡Viva el Rey! ¡Viva España!”

martes, 24 de julio de 2007


En la primera parte dejamos al oso Yogui con la palabra en la boca. Continuemos pues con su disertación al respecto de la caza de Mitrofan.

Las tribulaciones del oso Yogi
(2ª parte)

Nicola Lococo, filósofo
Deia, 2 de noviembre de 2006

-"Mientras ande suelto tan soberano irresponsable, tú, yo y todos los de nuestra especie estaremos en peligro. Por ello, ya podemos ir advirtiendo a Ricitos de Oro, para que a su vez, dé el parte a los Tres Ositos, y que éstos pasen la bola al Osito Misha, a Balú, en la India, a Yakie el osito, a Ben, en las Montañas Rocosas, hasta, no estaría de más, que se diera la voz de alarma a los ositos de peluche, incluidos, los de Froilán y toda la cuchipanda, todo sea que el mequetrefe de su abuelo, despechado por no encontrar ejemplares en la fauna, la emprenda a tiro limpio con ellos.

¡Hey! ¡Búbú! No creas que he empleado la expresión soberano irresponsable de modo coloquial y arbitrario, ¡muy al contrario!, resulta que este individuo está sancionado por la Constitución española como un auténtico y genuino irresponsable. Es decir, que carece de responsabilidad. Y por consiguiente, haga lo que haga, diga lo que diga, no puede ser juzgado ni llevado ante tribunal alguno, pues Su Majestad, en esto, como en todo lo demás, parece estar por encima de la ley, cuando con idénticos hechos otros ya se encontrarían al margen de ella, o en la cárcel.

Y claro está, ¡Bubú! él, sin vergüenza, trapisondista donde los haya, se jacta de sus trofeos obtenidos ora en Tanzania, ora en Tailandia, sin ser tenido por ello como sanguinario turista reincidente. Pues ahí donde lo ves, la tiene tomada con los de nuestra preciada piel. Al menos así lo deduzco yo de otro turbio asunto acaecido allá por la primavera de 2004 en Rumanía, donde también pereció un colega en oscuras y etílicas circunstancias andando el susodicho por medio.

Sin que sirva de precedente, he perdido el apetito ¡Búbú! Será mejor recogernos e invernar antes de tiempo, dando por finalizada la temporada estival. No deseo acabar mi disoluta y feliz existencia de alfombra en la Zarzuela. Según nos vaya entrando el sueño, hagamos por recordar tiempos más propicios, en los que los reyes acababan sus días de cacería, como el visigodo Favila, hijo de Pelayo, devorado por un ancestro nuestro y de Mitrofan.

lunes, 23 de julio de 2007

El único chiste que hay que prohibir: la Monarquía

"Cualquier sociedad que renuncie a un poco de libertad para obtener seguridad no se merece ni una ni otra y acabará perdiendo ambas"

Benjamin Franklin.


El único chiste que hay que prohibir: la Monarquía

Hugo Martínez Abarca | 21-07-2007 | Artículos de Opinión

Hace medio año ya fue conocida la portada del caducaHOY, suplemento de humor del Deia, contra la que se querelló la Fiscalía de la Audiencia Nacional por mostrar al rey cazando de igual a igual a uno oso borracho; de la misma tacada se querelló contra un artículo de Nicola Lococo en el que el autor se ponía en el lugar del pobre osito alcohólico. Con todo, a la Fiscalía no se le ocurrió entonces pedir el secuestro de la revista, como ha hecho ahora con el número de El Jueves.

Objetivamente es una imbecilidad propia de un fanático no darse cuenta de que en 2007 esa medida sólo podría provocar lo que de hecho ha provocado: la reproducción de la portada en todos los blogs, páginas webs y en todas las ediciones digitales de los periódicos salvo el ABC. Además consiguió la medida que se agotara la revista: nada más enterarme bajé de kiosko en kiosko y en ninguno quedaba ningún ejemplar de El Jueves; incluso me crucé con una persona que iba con dos ejemplares y una enorme cámara de fotos (un periodista, supongo: vivo al lado de la Agencia EFE), hasta que finalmente encontré un ejemplar en un VIPS.

Si el objetivo era impedir la divulgación de este número hemos de suponer que de la Casa Real al Juez del Olmo ha habido un hilo de comunicación plagado de imbéciles en el que ni una sola persona se ha dado cuenta de que la medida era contraproducente. Pero probablemente no era ese el objetivo: probablemente se trata de un aviso a navegantes. El tema no es ocultar esta portada, sino tener asustados a los viñetistas para la siguiente: que no se vuelvan a atrever. Es decir, instaurar el miedo como instrumento para la censura.

Es conocido que cada vez que en algún medio de comunicación se ha publicado algo que disgustara a la Casa Real el medio en cuestión ha recibido una llamada pidiendo que reconsiderara el enfoque, que es un eufemismo que quiere decir "oyes, que no se vuelva a repetir, ¿estamos?".

Hoy mismo Deia explica que alguna de esas llamadas fue recibida en El Jueves. Cuando este tipo de avisos no fue suficiente fueron por la vía judicial en enero pero sin pedir el secuestro del número. Dado que seguía atreviéndose algún medio, ayer decidieron ir por la vía censora: y el próximo que me haga bromitas sobre la monarquía ya sabe a qué atenerse.

Aunque nadie se ha encargado de relatar la secuencia de los hechos (ni probablemente lo haga nadie nunca), parece obvio que la Casa Real hizo una llamadita al Gobierno y de éste fueron bajando las órdenes a través de la Fiscalía General del Estado hasta la Fiscalía de la Audiencia Nacional. Si no es así, en las próximas horas Conde-Pumpido pedirá a ésta que retire la petición. Como eso no sucederá, el cese de Cándido Conde-Pumpido tiene que ser inmediato: una democracia no puede tener un Fiscal General del Estado que proponga el cierre de un medio por hacer bromas sobre ningún cargo político.

Conde-Pumpido tiene que irse ya mismo, pero no dejaría de ser una cabeza de turco: causa vergüenza ajena que ningún ministro ni ninguno de los partidos mayoritarios haya tenido las agallas democráticas para exigir la retirada de la medida censora; es vergonzoso que los medios de comunicación no sean unánime e inequívocamente contrarios al ataque a la libertad de expresión que aparece en medios internacionales para nuestro sonrojo (vean aquí la noticia en el Times, que es el primero en el que he buscado). Pero es la guinda a una vergüenza que dura ya tres décadas en las que se ha silenciado todo sobre los trapicheos económicos del abuelo Borbón, en los que ningún medio ha tratado el verdadero origen del marichalazo, en los que los guiñoles no tienen muñeco del Rey como muestra de respeto... Treinta años en los que la monarquía con la ayuda de todos los aparatos del poder ha sido lo que por esencia no puede dejar de ser: una institución antidemocrática.

La censura de ayer debe tener dos tipos de respuesta: una jurídica y otra política. La jurídica es sencilla dada la ingente difusión que ha tenido la portada censurada: escribamos todos a la fiscalía explicando que nosotros también hemos publicado la portada y que cualquier pena que pidan para los viñetistas de El Jueves nos debe caer a nosotros (obvia decir que yo ya lo he hecho y que voy a dar toda la difusión que pueda a esta idea a través de meneame y de su equivalente en el blog de escolar).

La respuesta política es inaplazable: ya está bien de ocultar un debate fundamental en nuestra democracia. Ya está bien de aceptar silenciosamente que una familia de parásitos se forre y tenga una capacidad de influencia política muy por encima de la reconocida por el hecho de haberse llevado bien con un dictador y haberse puesto a procrear después. Hay que abrir claramente el debate sobre la Tercera República que nos evite el chiste macabro (de muchísimo peor gusto que la viñeta de El Jueves) que supone tener que financiar a una Casa Real cuya gestión económica no sólo es opaca sino que no se puede cuestionar ni en el Congreso.

Quizá la cacicada dictatorial de ayer tenga la virtud de acelerar la llegada de la Tercera República (y con ella mi jubilación, pues con la venta del dominio www.iiirepublica.es podría vivir bastante bien...), pero ello no sucederá si volvemos a mirar para otro lado diciendo que ’esta vez se han pasado’ como si la Monarquía no fuera una pasada en sí misma.

NOTA: Por si alguien anda falto de imaginación, el texto que he enviado y que cualquiera puede copiar es el siguiente: "Ante la increíble censura de El Jueves quiero informarles de que yo también he publicado la viñeta en mi blog. Somos miles quienes la hemos publicado, pero como de pequeño me dijeron que era malo ser un acusica, sólo reconozco que yo también lo he hecho y que por tanto, en aras de la igualdad ante la ley, exijo que me caiga la misma pena que a los dibujantes de El Jueves."

Los "Gorrones" se van de "campamentos"

Libertad de expresión. A la atención del Ilustre Juez Del Olmo.


Libertad significa el derecho a decirle a la gente lo que no quiere oír.
George Orwell.

A continuación voy a poner un artículo censurado y por el cual quieren juzgar a su escritor. En días posteriores también subiré la reacción de este a su enjuiciamiento.

Las tribulaciones del oso Yogi (1ª parte)

Nicola Lococo, filósofo
Gara, 2 de noviembre de 2006


Nos hallamos en el tranquilo y apacible Parque Yellystone, donde el pícaro Oso Yogi y su inseparable compinche de aventuras Bubú tienen instalada su morada. Ambos se disponen a emprender su habitual paseo matutino anterior al almuerzo, y de paso, inspeccionar las inmediaciones del paraje en el que tienen previsto perpetrar su próxima fechoría en el menor tiempo posible, con la mayor eficacia, al margen de la estrecha vigilancia a la que les tiene sometidos la autoridad del lugar.

Todo va como de costumbre, y llegan los primeros turistas provistos de las típicas cestas repletas de exquisitos y suculentos manjares, en los que seguramente ya habrán reparado los golosos ojos de nuestros dos simpáticos amigos. Mas, noticias llegadas de muy lejos, darán al traste con la secuencia lógica de los acontecimientos por todos conocida, sumiendo en la incertidumbre el despreocupado Carpe Diem, y el Beatus Ille en el que trascurren sus plácidos días.

-"¡Huohohoyyy! ¡Búbú! Acabo de darme una vuelta por la cabaña del guardabosques y no me he podido resistir: le he afanado este teletipo. ¡Oso que está informado nunca será cazado! Veamos qué dice su titular: El rey de España mata un oso borracho. ¡He! ¡He! ¡He! ¡Heyyy! Veo la sorpresa en tu gesto Búbú. Yo también he entendido lo mismo. ¡Craso error!

Por esta vez, el rey de copas no es quien nosotros pensamos, sino nuestro congénere, el bueno de Mitrofan, otrora alegre y dicharachero colega del osito Misha, a la sazón, mascota oficial de las Olimpiadas de Moscú. No sé a ti, ¡Búbú! ¡Pero me da en la nariz que no ha sido limpia la lid! Nuestro camarada apenas contaba con tres añitos de edad, pesaba sólo 150 kg, y a fe mía que era goloso y glotón como todo hijo de vecino, pero nunca probaba el alcohol de no ser obligado a ello, pues era abstemio.

Veamos qué más dice: Bla, bla, bla, un periódico ruso, el Kammersant, se hizo eco del suceso, hará cosa de una semana, gracias a la denuncia interpuesta por el vicedirector del departamento para la protección y el desarrollo de los recursos naturales de Vologda. ¡Hey! ¡Ahí es nada! Llamado Sergei Starostin. Bla, bla, bla. Este alto funcionario ruso destapó la lamentable y bochornosa práctica con la que su Gobierno tiene a bien agasajar a los más ilustres mandatarios extranjeros que les visitan, cuál es, ¡Huohohoyyy! ¡Búbú! ¡Agárrate fuerte las orejas! Organizar cacerías amañadas donde los animales somos debidamente drogados momentos antes de ser puestos a tiro en el coto de caza, negándosenos así toda oportunidad. ¿Qué te decía? ¡Habráse visto! Pero continuemos con la lectura ¡Búbú!, de ello podría depender nuestras vidas. ¡Si no dejas de leer, nada dejarás de saber! ¿Te lo puedes creer? Aquí se refieren a Mitrofan como la pobre bestia ¿quién es el bestia?

Más abajo dice que antes de dar comienzo la cacería, nuestro correligionario disfrutaba de su dichosa existencia en su veraniega residencia de Novlenske, donde de buenas a primeras fue capturado, metido en un deplorable cajón-jaula y trasladado sin miramientos a tan fatídica farsa. ¡He! ¡He! ¡He! ¡Heyyy! ¡aquí lo dice bien claro: durante el penoso trayecto se le suministró un colosal mejunje de rica miel, aderezada con abundante vodka de la peor calidad. ¿Te das cuenta? ¡Esta es la nueva treta que han ideado para darnos caza y captura! ¡Pero yo soy un oso muy listo!

De ahora en adelante, nos abstendremos de sustraer a los turistas cesta alguna, por si un agente secreto al servicio de su majestad, deseara tendernos una trampa. Huelga decirte ¡Búbú! lo piripi que salió de su triste habitáculo el pobre Mitrofan. Por supuesto, la Casa Real ha desmentido rotundamente el incidente. Pero fuera de las fronteras, de su coto mediático, sus palabras no deben gozar de mucho crédito, pues a la creciente repercusión diplomática, a la carta abierta que la actriz francesa Brigitte Bardott le ha remitido publicada a su Alteza en los distintos medios europeos, a la enérgica protesta de repulsa expresada por distintas organizaciones internacionales, ahora se ha sumado el propio presidente de la región de Vologda, V. Pozgalve, quien superado por los acontecimientos, se ha visto forzado a abrir una investigación para esclarecer los hechos por los que el mismísimo Putin, desde el Kremlin, ha mostrado su interés, no en vano es presidente de una vasta nación, conocida en todo el orbe, como el Gran Oso Ruso.

Pero no te hagas ilusiones ¡Búbú!, no seas iluso."-

Continuará...